Tesorería y beneficios (II)

15 de octubre de 2020


En la entrada anterior (Tesorería y Beneficios) traté de exponer la poca correlación entre estos dos conceptos empresariales, y que muchas veces tendemos inconscientemente a confundir. Y recordaba la frase “redonda” de un profesor que tuve en la Facultad: “la tesorería de una empresa es una realidad, el beneficio es una opinión”.

Y como anuncié, quiero ahora desarrollar la segunda parte de esa frase: que el beneficio de una empresa es una “opinión”.

A primera vista la afirmación puede sonar poco convencional, pero se ajusta perfectamente a la realidad si consideramos la definición (el concepto) de opinión que el diccionario de la RAE recoge ya en su primera acepción: “juicio o valoración que se forma una persona respecto de algo o de alguien”.

Tesorería y beneficios

30 de septiembre de 2020


Hace unas semanas ya escribí sobre la gestión de tesorería en la empresa: su importancia, y en concreto qué podemos hacer en tiempos de crisis.

Hoy me gustaría detenerme en dos conceptos que, aunque aparentemente conectados, tienen muy poca correlación, sobre todo en el corto plazo: la tesorería y los resultados (beneficios o pérdidas).

Aunque tengamos muy poca experiencia, resulta fácil comprender que es posible estar perdiendo dinero (incluso durante largas temporadas) mientras disponemos de una tesorería “desahogada”. Los motivos pueden ser muy variados: la obtención de una nueva línea de descuento que nos permita “anticipar” un mayor volumen de ventas, la mejora de los plazos de cobro a clientes (reducción) y de pago a proveedores (ampliación), la obtención de un crédito, etc.

Financiar el decrecimiento

14 de septiembre de 2020

En la última entrada hablaba de la importancia para las empresas de una buena gestión de tesorería: siempre, pero en especial en tiempos de crisis como -me temo- van a ser los que se avecinan.

Y concluía que -más que la mejor herramienta informática-, el secreto para esa gestión son la dedicación diaria, y sobre todo dos actitudes: ORDEN y SISTEMÁTICA. Algo de “sentido común” y al mismo tiempo difícil de llevar a cabo en la práctica si no nos empeñamos y nos procuramos un conocimiento específico.

Hoy quiero traer a colación otro tema financiero que considero esencial, pero sobre el que nunca he encontrado un libro, ni tan siquiera un artículo en revistas especializadas o de divulgación. Y que me parece una realidad que todos –no sólo los empresarios o directivos- hemos experimentado en alguna ocasión.

Tesorería en tiempos de crisis

21 de agosto de 2020

En economía es esencial el “optimismo”, pues –cómo la Bolsa- se mueve en base a expectativas. Por eso basta que a los actores económicos nos entre el miedo, para que la economía se contagie y se contraiga: se desacelere el consumo, se retraiga el gasto de las familias, esto se refleje en la producción, y automáticamente entremos en ese círculo vicioso que lleva a la recesión y a las consecuencias que todos conocemos, encabezadas por el aumento del paro.

Pero por muy optimistas que queramos ser, no hace falta disponer de una bola de cristal para saber que este próximo otoño va a ser difícil para miles de empresas y autónomos en nuestro país. Sectores como el turismo (hostelería, restauración, transporte de viajeros, etc.) o el ocio, pero también empresas de servicios asociados a esos sectores u otros como la construcción; van simplemente a “sobrevivir” al verano. Y durante los próximos meses, salvo que se produzca un profundo cambio en la situación sanitaria (que no parece posible dado el desconcierto y  la descoordinación entre las autoridades) empezará la cascada de concursos de acreedores.

Sostenella y no enmendalla

9 de agosto de 2020

Últimamente me ha venido a la cabeza en varias ocasiones esta expresión del castellano antiguo que, como es sabido, se utiliza para referirse a la actitud de quien mantiene obstinadamente sus errores -por la razón que sea, pero en la base siempre por falta de otra actitud necesaria llamada humildad- y aun a costa de causar daño o perjuicio.

Y me ha venido a la cabeza en especial las dos veces que he visto en los medios de comunicación los aplausos a nuestro Presidente del Gobierno por parte de los que –¿por mantener el puesto?- tanto le adulan: a su entrada al primer Consejo de Ministros tras la reunión extraordinaria del Consejo Europeo, y a su llegada a la bancada del Congreso para el Pleno Extraordinario en el que debía haber dado detalles sobre el fondo de recuperación acordado en la mencionada reunión del Consejo Europeo.